{no-no-confiar-}

No me gusta en realidad escribir tan seguido, pero hoy para variar... estoy mal.
contrario a todo lo que pasa en mi alrededor, que son cosas buenas... como los artículos de la prensa y cosas así.
Pero yo... no estoy tan bien como solía estarlo... tal vez es el peso de un año más, el cambio climático, o que ya no hay vacaciones.
No sé, es bueno que nadie lea esto, puedo ser yo, y siguen siendo cartas hacia mi mismo.

Tengo una idea estúpida de creer en las personas, y a pesar que creo que la mayoría de la gente me ha fallado, y no es que no entienda que la gente cometa errores, si no que, nunca termino de entender, que no se puede confiar, aún si son personas que quiero, y que considero amigos.

Iba emocionado, había escrito tantas cosas, sé que no soy el mejor escritor, pero me sentía feliz, lleno de ideas para poder jugar con ellas, y ellas, frías, me gritaron, y me veían como si yo tuviese las respuestas a todo el mundo. No habían ido a mi exposición, ni me habían preguntado mucho del reportaje del periódico. Y no es que pida ser el centro de atención, pero no parece que pueda compartir sentimientos con mis mejores amigas.

Y luego, lo dijeron, así, rotundamente y sin pensarlo, no me querían ver, y yo, no las quería ver, ¿para qué?, me sentí estúpido, solo, y con unas ganas enormes de llorar, no sé si por estar decepcionado, si porque había sentido que mi tiempo estaba mal gastado, porque eran personas que pensé, que no lo harían, por enojo... no sé.

Dijeron no podemos, y trate de entenderlo, aunque mi cerebro no quería procesarlo, porque sarbe, iba con unas ganas enormes de comentarles sus ideas, feliz... pero ellas no parecían entender... y esta bien, creo que he entendido.

No eran ellas las que deben entender, soy yo... no se puede trabajar... no se puede confiar, la gente no es así, y aunque he tratado de tener un sistema de trabajo solitario, a veces, quisiera salir a la terraza de mi cuarto, ver el cielo, y hablar con alguien, creo que ya no se puede hablar con nadie, Dios, ha sido tanto desde que no hablo con alguien, hablar... si... hablar de sentimientos reales, de la vida... de lo que pasa.

Y es entonces cuando aparezco, y me abrazo, no sé, si ya este algo loco, por tener que hablar conmigo, pero afuera, nadie quiere hablar, y debo ser el sarbe superficial que habla cosas superfluas, y sonreir por supuesto...

Todos saben que ahí estás... y nadie lo sabe. Hoy es el 5 día de mi depresión rarosa... pero decirlo, es como decir, que soy una víctima y un ser que exagera las cosas, creo que es otra razón por la que no puedo decir lo que siento.

Me hace falta... tanto...
¿Amigos?, con el tiempo se vuelven ocupados, y te preguntan sólo cómo estás... y ahora ellas... no creo que las vea tan seguido...

Iba caminando hacia el bus, y no sabía que pensar, si detenerme en la pasarela y ver los carros pasar por un momento, solo para sentir que estaba ahí, inerte, por un momento. O talvez solo gritar, o correr para dejar toda esa energía fluir y salir, pero no... camine, y seguí... y me dije a mi mismo, que ni ellas, a las que quiero... me iban a detener, y aunque siempre todos se vayan, y todos decidan irse por otros caminos, y aunque tengan otras prioridades, nadie me va a detener, y aunque en las noches llore sin sentido, y me golpee, el siguiente día va a ser diferente, y aunque esté solo, voy a seguir, voy a demostrarme que soy capaz.

Y hable con vos... y te dije... no me abandones, vos sabes que solo estoy yo... acá, vos me ves, vos sentís lo que yo siento, porfa, no me abandones, porfa toma mi mano, y llevame, porfa, ayudame.
Vos has hecho esto, y vos me tenés acá, dame... tiempo, dame... fuerza.

Y entonces... lloré.