Luego de 10 años de salir del colegio, uno viene y se pregunta. ¿qué he logrado?
¿he cumplido lo que le había prometido al yo de 17 años?
Sé que uno no puede cumplir todas las cosas y seguramente descubrí otras, diferentes y en otros estados.
Y aún faltan tantas cosas.
Mi lista:
No cumplimos lo de "por siempre amigos"
No se cumplieron las promesas de "nunca me dejés"
Varias relaciones fallidas,
y varias veces que dije "te amo"
ocasiones que quise regresar en el tiempo, aunque era... diferente... o ¿peor?
Dije adiós a un amor que se fue lejos.
Que regresaría y nunca lo hizo.
Y confié en personas que fueron efímeras como un fósforo.
Aprendí a tratar a las personas,
a ser exigente conmigo mismo,
a dar lo mejor de mi,
y ser el crítico más duro.
A enamorarme de mi trabajo y de todas las cosas que salen de mi mente.
de mis manos.
de mi corazón.
Y me enamoraba de mis proyectos
y de las personas.
Y en los proyectos me iba bien.
-o muy bien-
y con las personas
mal
o muy -dañinas-
Entré al teatro.
y mi vida cambió.
fui más abierto a las cosas,
a la vida.
Entendí el sexo.
y como aceptar mi cuerpo, mi rostro.
mi voz.
...
Y aún me falta,
o me faltan tantas cosas,
Las noches se convierten en raras estrellas que me señalan.
y los deseos (que era la intención de esta entrada la dejaré para después)
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